Proverbios 3:1-2 – “Hijo mío, no te olvides de mi Ley, y que tu corazón guarde mis mandamientos, porque muchos días y años de vida y de paz te aumentarán.”
“Hijo mío, no se aparten estas cosas de tus ojos; guarda la ley y el consejo . . . Cuando te acuestes, no tendrás temor, sino que te acostarás, y tu sueño será grato.”